Grietas: el primer llamado de atención

Las grietas son los visitantes menos deseados en cualquier edificación, sea del tipo que sea, pero no por eso dejan de ser uno de los problemas más comunes e inevitables, y no queda más remedio que tomar cartas en el asunto y prevenir.  

Aparte, suelen aparecer en dos momentos de la construcción: antes y después del fraguado. Las primeras son producto de los movimientos en la estructura y daño causado por heladas, mientras que las segundas contemplan las causadas por el diseño de la estructura, inestabilidad debido al volumen y las fisicoquímicas.

Las fisuras son el comienzo de las grietas y no aparecen en las paredes de la nada, hay distintos factores que fomentan su aparición, tales como:

• La corrosión en las uniones metálicas.
• La aplicación de cargas muy pesadas, exceso de agua en la mezcla de vaciado.
• Deficiencia de vibración en el momento de vaciado.
• Fuerzas de contracción y expansión debido a los cambios de temperatura.
• Asentamiento de la edificación.

A fin de evitar este tipo de inconvenientes algunos sitios en internet ofrecen soluciones para el tratamiento de grietas y filtraciones, bien sea del modo “hágalo usted mismo” u ofertando algún servicio, como es el caso de  https://reformacoruna.com, un portal que ofrece una abanico de servicios para solventar los problemas de las grietas y fisuras en las paredes.

No más agua de la necesaria

Otro de los problemas más comunes que suelen asolar las edificaciones son las filtraciones, en temporada seca es difícil detectarlas pero en época de lluvia suele ser más fácil encontrarlas. Las humedades son originadas por las filtraciones, las cuales pueden ser por aguas subterráneas o por agua de lluvia. Las paredes, terrazas, porches y muros son los primeros elementos afectados por la humedad, esto sin mencionar que representan una dificultad para la estructura de la edificación.

Una filtración se genera en el momento en que el agua se aglomera en el lado externo. Esta acumulación de líquido se va filtrando hacia el lado interno de las paredes gracias a la permeabilidad de las mismas, creando así caminos de agua y la inevitable humedad. Por lo general son producidas por:

• El terreno no goza de un drenaje ideal.
• Las paredes no tengan un sellado adecuado.
• Poca permeabilización en las paredes.
• Grietas.

También hay que tener en cuenta el moho y el desgaste de muros y paredes generado por las lluvias. Así como también la temperatura externa e interna de la edificación, esta humedad se genera cuando la temperatura de una superficie es menor a la del punto de rocío con la que interactúa. Otra causa serían las tuberías rotas o mal conectadas, el goteo constante produce manchas oscuras y desconchamiento.

Medidas preventivas

Pero no todo han de ser malas noticias, ya se conoce cuáles son los problemas más comunes que pueden afectar las paredes de una edificación, ahora no queda más que saber cómo prevenirlos:

• Tener cuidado con el contenido de agua en la mezcla del concreto, el porcentaje de agua presente no ha de superar el 0.5 %.
• Disminuir el nivel de humedad no permitirá que la contracción impacte en la entereza de la estructura.
• Utilizar materiales de calidad pueden garantizar una disminución de futuras fisuras.
• En la mezcla debe haber un equilibrio, por ello los materiales deben ser óptimos para evitar que se contraigan, los densos y de tamaño considerable son la mejor opción.
• El acabado es una parte fundamental de la construcción, de este depende buena parte de la impermeabilización.
• Es importante que no se sobrecargue ya que puede producirse un asentamiento por donde se filtre el agua.